Piensa en esa primera cita.
La cojonuda. ¿La tienes? Ok, sigue leyendo.
Risas, conexión, la sensación de que las horas son minutos. Te despides con una sonrisa de memo, mema o meme (me gusta ser inclusive), y la certeza de que algo bueno acaba de empezar.
Llegas a casa como en una nube. Te ha pasado, lo sé.
A la mañana siguiente, coges el móvil con esa chispa de ilusión. Ves su mensaje. Lo abres y lees:
🗨️ "Estimado/a usuario, bienvenid@ a mi vida. Soy educador con 16 años de experiencia, y estos son mis planes a los que te puedes suscribir. Estos otros son mis mejores artículos, y tengo un galardón en LinkedIn."
💣¡BOOM!
Una puñalada directa al corazón de la expectativa. El hielo reemplaza al fuego.
Pues eso, exactamente eso, es lo que está haciendo el 99% de la gente en Substack.
Un puto email de bienvenida sin personalidad. Un copia y pega corporativo que huele a oficina rancia y a "me importas una mierda".
El resultado es siempre el mismo: indiferencia.
Y la indiferencia, amigo mío, es el veneno que mata tu proyecto antes de que aprenda a caminar. Es la sentencia de muerte que te condena a la carpeta de 'Promociones' de Gmail para el resto de la eternidad.
“Pero Jones, yo no uso Substack para vender, sino para conectar con almas gemelas a partir del noble arte de la escritura.”
Ok, me parece respetable. Pero no espantes a tus almas gemelas en el primer correo, pardiez.
He visto a cientos de creadores y escritores cometer el mismo error.
Por eso he creado "El plan de 4 pasos". Y lo vas a tener hoy aquí, y GRATIS (cuando pasen unas semanas este artículo se bloqueará y sólo podrán acceder suscriptores de pagamenta, es lo que hay).
✉️ El puto correo de bienvenida es LA CLAVE DE TODO
Te diré un secreto.
El correo de bienvenida no es una formalidad. No es un tema baladí. No te lo tomes a la ligera.
El mail de bienvenida es tu primera bala que vas a disparar, y quizá la última.
Es tu declaración de intenciones. Es el momento exacto en el que tu lector decide, en menos de 3 segundos, si te va a dedicar su recurso más valioso (su atención) o si te va a olvidar para siempre.
Te atiende (para siempre)
Pasa de ti (para siempre)
Y todo se decide en ese correo. Esa es la importancia que tiene.
Vale, ahora una pregunta que lo cambia todo:
¿Y si ese primer correo, esa primera bala, pudiera no solo evitar la indiferencia, sino generar una puta obsesión?
¿Y si pudieras usar esos 30 segundos iniciales para que alguien piense:
"Joder. Por fin. He encontrado a mi persona favorita en internet."
Eso es lo que vas a aprender hoy aquí. Y encima gratis (si lo gratis es así de bueno, cómo será lo de pago)
4 pasos para dejar de dar vergüenza ajena
Paso 1: El Asunto. Tu granada de mano para que te abran sí o sí.
Paso 2: El Gancho. Cómo validar su decisión y hacer que te amen en 3 segundos.
Paso 3: El Cuerpo. Dónde conectar, demostrar que eres la puta autoridad y que otros ya confían en ti.
Paso 4: El Cierre. La orden final para que hagan exactamente lo que quieres.
Paso 1: EL ASUNTO - Es tu granada de mano (0-2 segundos para impactar)
Esta es tu primera batalla. Si la pierdes, no hay guerra. Tienes una oportunidad para que te abran entre ese mar de mierda que es la bandeja de entrada de Gmail.
💡Los datos no mienten: un email de bienvenida tiene una tasa de apertura media del 50-64%, frente al triste 21% de un correo normal. No puedes cagarla aquí.
¿Qué dice la 100cia?
La claridad y la personalización son tus mejores armas. Incluir el nombre del suscriptor puede disparar la apertura (lástima que Substack no tenga esta opción).
Un estudio de 2022 también demostró que los caracteres especiales (emojis, símbolos) tienen un impacto positivo y significativo en las tasas de apertura porque rompen el patrón visual.
Y una cosa que no dice la 100cia pero que te digo yo es que usar antes del asunto “Re:” es lo más potente que vas a poner en tu asunto. Y este truco que no salga de aquí.
Tu Misión:
Combina claridad, personalización y un toque de intriga. Quieres que la gente ABRA ese puto correo de bienvenida entre esa marea de mierda de su Gmail.
Ejemplos que funcionan:
Directo y con valor: "Juan, aquí tienes tu [lo que sea que prometiste]"
Comunidad + Curiosidad: "Estás dentro. Esto es lo que va a pasar ahora..."
Con un toque de cojones: "Re: notificación AEAT [REF_2025028303]"
Vale, la tercera es de ser muy hijoputa, NO LA USES salvo para casos muy extremos en los que te la sude todo, o que le vayas a ofrecer algo muy bueno en el interior del correo.
Paso 2: EL GANCHO (Primeras 3 líneas) - La validación instantánea
¡Te han abierto! Ahora tienes 3 segundos para validar su decisión. El 74% de la gente espera este correo de forma inmediata. Su interés está en el punto más alto que jamás estará. Este es el momento de aplicar el principio de Reciprocidad de Cialdini: da primero y con contundencia (como Ilia Topuria).
¿Qué dice la 100cia?
Este es el núcleo del "Marketing de Permiso". Te han dado su permiso, y ahora esperan que cumplas. Validar su decisión al instante refuerza la confianza y justifica que te hayan dejado entrar en su bandeja de entrada.
Ofrece lo mismo (o más) que prometiste en la descripción de tu newsletter o en la página que tengas para captar correos. Y ofrécelo en esta parte, en el GANCHO. No seas tan gañán de ponerlo abajo del todo para que no lo vea casi nadie.
Ya has dado tú primero. Ahora el lector se sentirá en deuda contigo. Esto es 100sia del método 100tifico.
Tu Misión:
Entrega valor inmediato y establece el tono.
Ejemplos de GANCHOS que funcionan:
"Bienvenido, Juan.
Aquí tienes la guía que te prometí: [Enlace bien visible]
Ahora que tenemos lo importante fuera del camino, hablemos claro..."
Paso 3: EL CUERPO - Conexión, autoridad y prueba social
Aquí es donde te diferencias del 99%. Olvídate de los formalismos corporativos. Tienes que conectar, demostrar que sabes de lo que hablas y que no eres el único que lo piensa, sino que está demostrado. Todo en un solo cuerpo de texto.
¿Qué dice la 100cia?
La gente confía en las acciones de otros (Prueba Social) y sigue a figuras de Autoridad y a marcas con las que siente una conexión (Simpatía). Un estudio demostró que añadir reseñas (prueba social) a un email puede duplicar las conversiones.
Tu Misión
Teje estos tres elementos de forma sutil pero potente. Ya sabes:
Conexión
Autoridad
Prueba social
Ejemplos de CUERPOS que funcionan:
"... Mi nombre es [Tu Nombre] y empecé esta newsletter porque estaba hasta los cojones de [el problema que resuelves]. No soy un gurú, solo alguien que ha metido la pata mil veces y ha aprendido un par de cosas por el camino. (Conexión/Simpatía)
De hecho, una de esas lecciones es la que ayudó a [Nombre de Cliente o Testimonio] a conseguir [Resultado Específico]. (Prueba Social)
Cada martes te enviaré una idea, una estrategia o una hostia de realidad para que consigas [el objetivo de tu lector]. Sin rodeos. (Autoridad y promesa)"
Paso 4: EL CIERRE Y LA LLAMADA A LA ACCIÓN (CTA) - La Misión
El email casi ha terminado. Es el momento de darles una orden. La clave aquí es pedir UNA SOLA COSA. Abrumar con múltiples opciones lleva a la "parálisis por análisis", y el resultado es que no harán nada.
He visto mails de bienvenida en los que te piden: visitar sus redes sociales (al menos 4), mirar su diploma de licenciado, entrar a su curso, ver su mejor post, y que le comentes qué te ha parecido. NO HAGAS ESO, por favor.
¿Qué dice la 100cia?
El principio de Compromiso y Coherencia de Cialdini dice que si alguien hace un pequeño compromiso (registrarse), es más probable que haga otro pequeño compromiso si se lo pides. Este "micro-sí" los prepara para futuras acciones más grandes.
Tu Misión
Pide UNA SOLA acción de baja fricción que refuerce vuestra nueva relación.
Ejemplos de CTA que funcionan:
El más fácil: "Una última cosa: responde a este email y dime cuál es tu mayor reto ahora mismo con [tu tema]. Los leo TODOS."
El social: "¿Quieres más? Sígueme en [Tu Red Social Principal] donde comparto ideas a diario." (Usa un botón visualmente potente).
El práctico: "Para asegurarte de que recibes mis correos (y no acaban en el limbo de las promociones), añade esta dirección a tus contactos."
Junta estos cuatro pasos y tendrás un email de bienvenida que no solo saluda, sino que seduce, convence y prepara el terreno para una relación larga y rentable. Es tu primera bala, así que asegúrate de que da en el blanco.
Tengo que reconocer que a raíz de este artículo revisé mi mail de bienvenida.
Era un asco.
He visto comunicaciones de la Agencia Tributaria con más gracia.
Lo acabo de cambiar.
Está mal que yo lo diga pero me quedó de lujo. Gracias por la inspiración y los consejos. Gran post.
El tuyo no es una mierda porque aún ni siquiera lo recibí 🤣